Emiliano Zapata nació el 8 de agosto de 1879 en el poblado de Anenecuilco en Morelos, México. Este es considerado uno de los más grandes personajes de la Revolución Mexicana.
La historia del hombre y de sus ideales, a 141 años de su nacimiento, siguen vigentes y presentes en la historia de México. Indiscutiblemente se convirtió en el símbolo de las luchas agrarias y sociales, de los movimientos de defensa hacia los más desprotegidos, de los grupos rebeldes y guerrilleros. Su lucha es considera como la más auténtica y antigua del país.
El Movimiento Zapatista
Emiliano Zapata encabezó un ejército formado por indígenas, campesinos, jornaleros y obreros que pertenecían a los sectores más afectados durante el período conocido como “El Porfiriato”, llamado así al Gobierno dictatorial de Porfirio Díaz.
El revolucionario luchó para que se restituyeran las tierras y manantiales entregados a las comunidades desde los tiempos de la Colonia, pero que les fueron despojados por hacendados y empresas extranjeras.
La importancia histórica del personaje y su lucha es que, sin el zapatismo, la Revolución Mexicana hubiera concluido solamente con un relevo en la presidencia del país. En cambio, el movimiento transformó el modelo de país que existía hasta entonces.
Uno de los hitos más avanzados de la gesta del Ejército Libertador del Sur, liderado por Zapata, fue la Comuna de Morelos, cuando los campesinos pobres liquidaron la propiedad capitalista, destruyeron el latifundio y llevaron a cabo el reparto agrario.
El Plan de Ayala
Este documento atacó a Francisco Madero por haber dejado en pie “la mayoría de los poderes gubernativos y elementos corrompidos de opresión del Gobierno dictatorial de Porfirio Díaz”.
Denunciaba la persecución y opresión sobre los pueblos que reclamaban sus derechos y la imposición de gobiernos estatales en contra de la voluntad de las mayorías.
Este plan, fechado el 28 de noviembre de 1911, se lanzó luego de la primera agresión militar ordenada por Francisco Madero contra el Ejército Libertador del Sur .
El sustento profundo del Plan de Ayala y de los intentos por llevarlo a cabo, fue la irrupción violenta de amplios sectores de las masas agrarias de Morelos y otros estados, quienes nutrieron el ejército campesino liderado por Emiliano Zapata.
El plan de Ayala descansaba en dos principios fundamentales:
- La expropiación y nacionalización de las tierras, en beneficio de los “pueblos de México”.
- Transgresión de la juridicidad burguesa, la cual dispone que los campesinos despojados de sus tierras entrarán en posesión de ellas. Esta posesión sería mantenida “a todo trance, con las armas en las manos”.
La tierra volverá a quienes la trabajan con sus manos” (Emiliano Zapata)
Recopilado por Germán Van de Velde