José Martí, el Apóstol, nació el 28 de enero de 1853 en La Habana. Es el ideólogo principal de la Revolución Cubana. Las ideas de Martí fueron las que impulsaron la lucha revolucionaria llevada a cabo por el Comandante Fidel Castro, Raúl Castro, Ernesto Che Guevara, Camilo Cienfuegos, entre otros/as líderes y lideresas.
En la historia reciente, la Revolución Cubana es un ejemplo para los Pueblos de Nuestra América. Nicaragua y Venezuela siguieron los pasos de Cuba para lograr el triunfo revolucionario. La Cuba revolucionaria, la Nicaragua Sandinista y la Venezuela Bolivariana son, sin duda alguna, ejemplos para que las protestas sociales maduren y se conviertan en insurrecciones populares en el resto de los Pueblos de América.
A continuación, recopilamos citas textuales del “Apóstol” que sirven de guía e inspiración para seguir librando la batalla de ideas contra el enemigo del norte, contra las “bestias rubias” opresoras de los pueblos de Nuestra América.
Frente a la coyuntura independentista vivida en aquel momento, Martí alertaba al Pueblo frente a los peligros del capitalismo y del imperialismo dominante:
“Cree el aldeano vanidoso que el mundo entero es su aldea, y con tal que él quede de alcalde, o le mortifiquen al rival que le quitó la novia, o le crezcan en la alcancía los ahorros, ya da por bueno el orden universal, sin saber de los gigantes que llevan siete leguas en las botas, le pueden poner la bota encima.”
“El lujo venenoso, enemigo de la libertad, pudre al hombre liviano, y abre la puerta al extranjero.”
Martí sentía en lo más profundo la lucha de clases que se desarrolló durante la colonia. El Apóstol pone en lo más alto la lucha del oprimido contra las injusticias del opresor:
“Los hombres naturales han vencido a los letrados artificiales. El mestizo autóctono ha vencido al criollo exótico. No hay batalla entre la civilización y la barbarie, sino entre la falsa erudición y la naturaleza. El hombre natural es bueno, acata y premia la inteligencia superior, mientras esta no se vale de su sumisión para dañarle. El hombre natural está dispuesto a recabar por la fuerza el respeto de quien le hiere la susceptibilidad o le perjudica el interés.”
Frente a estas injusticias, Martí envía un mensaje mediante sus ideas, un mensaje de patriotismo, de independencia y de unidad Latinoamericana. Destaca un mensaje claro para la juventud, para los gobernantes de nuestros pueblos y por último nos deja una dura crítica a los gusanos y vendepatria, malos hijos de Nuestra América:
1. Patriotismo
Martí engrandece el orgullo de ser Patriota y en uno de sus párrafos manifiesta:
“¿En qué patria puede tener un hombre más orgullo que en nuestras repúblicas dolorosas de América, levantadas entre las masas mudas de indios, al ruido de pelea del libro con el cirial, sobre los brazos sangrientos de un centenar de apóstoles?”
2. Independencia
Frente a la lucha independentista, Martí es claro en su coyuntura cuando menciona:
“El problema de la independencia no era el cambio de formas, sino el cambio de espíritu. Con los oprimidos había que hacer causa común, para afianzar el sistema opuesto a los intereses y hábitos de mando de los opresores.”
Es decir, plantea claramente la necesidad de la conciencia de clases que debe adquirir el/la oprimido/a para hacer frente a los hábitos inculcados por el sistema opresor.
Martí alertaba que “estos tiempos no son para acostarse con el pañuelo a la cabeza, sino con las armas en la almohada, las armas del juicio, que vencen a las otras. Trincheras de ideas, valen más que trincheras de piedras. De lo contrario, tendremos a los piratas de América en el poder.”
Con la lucha independentista: “Nuestra América se está salvando de sus grandes yerros, – de la soberbia de las ciudades capitales, del triunfo ciego de los campesinos desdeñados, de la importación excesiva de las ideas y fórmulas ajenas, del desdén inicuo e impolítico de la raza aborigen, – por la virtud superior.”
También pone en evidencia que, con esta lucha, “el tigre (refiriéndose al opresor, al enemigo de la humanidad) espera detrás de cada árbol, acurrucado en cada esquina”, para poder atacar.
Sin embargo, está completamente convencido que el “tigre morirá, con las zarpas al aire, echando llamas por los ojos”.
3. La Juventud
Martí valora profundamente el papel que juega la juventud en un proceso revolucionario independentista y en una de sus frases menciona:
“Los Jóvenes de América se ponen la camisa al codo, hunden las manos en la masa, y la levantan con la levadura de su sudor. Entienden que se imita demasiado, y que la salvación está en crear.”
Un claro mensaje para la juventud actual: “Crear, es la palabra de pase de esta generación.”
4. A gobernantes y a aspirantes a gobernar
El Apostol remarca las características que debe tener un buen gobernante en los países de Nuestra América y en ellas refleja una marcada tendencia social donde “todos disfrutan de la abundancia que la naturaleza puso para todos en el pueblo”. Expresa Martí:
“Allí donde se gobierna, hay que atender para gobernar bien; y el buen gobernante en América no es el que sabe cómo se gobierna el alemán o el francés, sino el que sabe con qué elementos está hecho su país, y cómo puede ir guiándolos en junto, para llegar, por métodos e instituciones nacidas del país mismo, a aquel estado apetecible donde cada hombre se conoce y ejerce, y disfruta todos de la abundancia que la naturaleza puso para todos en el pueblo que fecundan con su trabajo y defienden con sus vidas. El gobierno ha de nacer del país. La forma del gobierno ha de avenirse a la constitución propia del país. El gobierno no es más que el equilibrio de los elementos naturales del país.”
También destaca lo difícil que es ser gobernante y la necesidad imperiosa de preparación que tienen aspirantes a gobernar. En sus palabras, el Apóstol menciona:
“¿Cómo han de salir de las universidades los gobernantes, si no hay universidad en América donde se enseñe lo rudimentario del arte del gobierno, que es el análisis de los elementos peculiares de los pueblos de América? A adivinar salen los jóvenes al mundo, con antiparras yanquis o francesas, y aspiran a dirigir un pueblo que no conocen. En la carrera de la política habrá de negarse la entrada a los que desconocen los rudimentos de la política. El premio de los certámenes no ha de ser para la mejor oda, sino para el mejor estudio de los factores del país en que se vive. En el periódico, en la cátedra, en la academia, debe llevarse adelante el estudio de los factores reales del país. Conocerlos basta, – sin vendas ni ambages; porque el que pone de lado, por voluntad u olvido, una parte de la verdad, cae a la larga por la verdad que le faltó, que crece en la negligencia, y derriba lo que se levanta sin ella. Resolver el problema después de conocer sus elementos, es más fácil que resolver el problema sin conocerlos. Conocer es resolver. Conocer el país, y gobernarlo conforme al conocimiento, es el único modo de librarlo de tiranías.”
“Gobernante, en un pueblo nuevo, quiere decir creador.” (José Martí)
5. A los/as gusanos/as, traidores/as y vendepatria
Por último, el Apóstol critica duramente a traidoras/es y gusanas/os de Nuestra América:
“A los sietemesinos solo les faltará el valor. Los que no tienen fe en su tierra, son hombres sietemesinos. Hay que cargar los barcos de estos insectos dañinos, que le roen el hueso a la patria que los nutre. ¡Estos hijos de carpintero, que se avergüenzan de que su padre sea carpintero! Estos nacidos en América, que se avergüenzan, porque llevan delantal indio, de la madre que los crio, y reniegan, bribones, de la madre enferma, y la dejan sola en el lecho de las enfermedades.”
¡Estos “increíbles” del honor, que lo arrastran por el suelo extranjero danzando y relamiéndose! Por unos dólares, traidoras/es y vendepatria se arrodillan ante el enemigo de la humanidad, solicitando intervención extranjera en nuestros países. Estas/os desertoras/es piden fusil en los ejércitos de EEUU para atacar al hombre natural.
No hay razón, no hay dignidad; el vendepatria debe callarse. El gusano no tiene derecho a opinar sobre un suelo que vendió y que ya no es más de él. El traidor debe callarse: “que no hay patria en que pueda tener el hombre más orgullo que en nuestras dolorosas repúblicas americanas”.
Las ideas de Martí reflejan una clara postura de insurrección y rebeldía frente a las injusticias cometidas por el/la opresor/a. Enarbola la bandera del patriotismo para lograr la independencia definitiva de los Pueblos de Nuestra América.
«Un día como este, en que se cumple un aniversario más de su nacimiento, podemos decirle a Martí que hoy más que nunca necesitamos de sus pensamientos, que hoy más que nunca necesitamos de sus ideas, que hoy más que nunca necesitamos de sus virtudes.» (Comandante Fidel Castro)