Una de las más destacadas obras de Julio Cortázar es Rayuela, un clásico de la literatura universal que cuenta con una serie de particularidades que lo convierten en un ejemplar único para los lectores.
¿Por qué debes leer Rayuela?
-El juego: La novela fue planteada como un juego de niños, ya que el autor consideró que la imaginación literaria es muy parecida a la de un niño cuando juega. Por eso estructuró el libro de formas especiales para poder ser leído de varias maneras.
En su libro “Vuelta al Día en 80 Mundos” se inventa una máquina, la «Rayuelomatic», que calcula todas las lecturas que se pueden hacer con Rayuela.
-El lenguaje: En Rayuela, Cortázar inventó un idioma que se llama glíglico, inventado por La Maga (personaje de la obra), y que es una especie de español rehecho rítmicamente, que parece producto de un juego. Es como lo que llama el poeta mexicano Alfonso Reyes, la jitanjáfora, como la frase «de tín marín de do pingüé».
-Los opuestos complementarios: El escritor mencionó que su novela es un mándala, es decir un diseño gráfico de la India que lleva a la meditación, por lo que en la obra pone figuras opuestas que uno debe descubrir cómo se juntan, ya que son complementarias. La visión del hinduismo de la unidad brota de los contrarios.
Es por eso que Rayuela moviliza opuestos que existen solo en la medida en que se complementan con el otro.
-La música: En el texto, se da mucha importancia a la música y al jazz, género que a Cortázar siempre le gustó, ya que es una música que permite crear con libertad abierta a la experimentación, decía.
Por ejemplo, hay un cuento de Cortázar que se llama «El Perseguidor” cuyo protagonista es un músico de jazz que está buscando, a través de la música, salir de lo establecido y llegar a lo absoluto como una forma de liberación.
-El amor: También, se le puede considerar como una novela de amor, debido a que trata de dos parejas: la que el narrador tuvo en Buenos Aires, Talita, y la que estaba en París, que es La Maga.
Dos tipos de amor, de amar. Una mujer lo empuja a pensar en lo cotidiano y lo pragmático; mientras que la otra lo mantiene más enfocado a la meditación y espiritualidad.
Y ahora, ¿Qué esperas? ¿Te animas a leer Rayuela? Y si ya lo hiciste, ¿Cómo la leíste?.
Fuente: TeleSur