Compartimos un artículo de Manuel Salvador Espinoza, titulado «Trump, el show debe continuar». A continuación se presenta el texto:
La atención del seguimiento y monitoreo internacional sobre las elecciones del 2020 en los Estados Unidos de Norteamérica se ha centrado, en los últimos 30 días, en dos eventos de bastante interés e importancia de este proceso. Estos son visto como parte agua para poder escudriñar y visualizar que administración sea esta republicana o demócrata la que traerá nuevas calamidades para nuestros pueblos.
Las Elecciones de 2da vuelta en Georgia. Los pro y los contra
El 5 de enero del 2021 estaba estipulado a realizarse la 2ª vuelta de las elecciones para el senado en el Estado de Georgia debido a que los contendientes por ambos partidos no lograron obtener el 50% de votos requeridos en la primera vuelta el 3 de noviembre pasado. Los republicanos David Perdue y Kelly Loeffler obtuvieron 49,73% y 25,91% contra sus contendientes demócratas Jon Ossoff y el reverendo Raphael Warnock con 47,95% y el 32,9% respectivamente.
Actualmente en el senado, la balanza de fuerza se inclina a los republicanos. Estos tienen mayoría con una pequeña ventaja de 2 senadores sobre los demócratas (50 – 48). De ganar los dos escaños que se disputan por estar vacantes, los republicanos los superarían en 52 a 48 escaños o con solo ganar uno más la balanza seria siempre a su favor 51 a 49. De lo contrario los demócratas apenas empatarían (50-50) y si solo ganan uno siempre quedarán en desventaja.
La victoria en Georgia para los republicanos en esta 2da vuelta confirmaría la acusación de Trump sobre el fraude en otros 5 Estados en disputa. Para los demócratas significaría un asidero más para asegurar la inexistencia del fraude electoral. Para ambos partidos es importante desde la perspectiva mediática confundir y envenenarle más la mente a sus seguidores, ya que el país se encuentra profundamente dividido tras las elecciones presidenciales de noviembre pasado.
Tanto la victoria o derrota para ambos tienen más significado e importancia a largo plazo. Para los republicanos la ventaja en el senado, en el escenario que no puedan revertir la victoria electoral demócrata le facilitaría:
- Obstaculizar mucho y hasta impedir el nombramiento de muchos miembros del gabinete de gobierno sujetos a aprobación del congreso.
- Impedir la rápida la implementación de la agenda política interna y exterior del gobierno de Biden sobre todas aquellas que vayan a alterar o modificar aquellas heredadas de la administración Trump.
- Posibilidad de ejercer mayor presión en las negociaciones y cabildeo para lograr el consenso bipartidista donde se demande.
De lo político a lo Geopolítico
Para los demócratas bajo ese mismo escenario:
- Instalarían con rapidez a los miembros ya elegidos del gabinete de gobierno ya casi conformado.
- Estarían menos atados y con mayor nivel de maniobra ante a la capacidad de la mayoría republicana en el senado.
- Implementarían su agenda en los primeros 100 días, tratando de marcar la diferencia con la administración saliente.
- Accederían a los fondos exorbitantes para los temas como la mitigación de la pandemia, el cambio climático, generación de programas económicos para superar el desempleo y temas torales de política exterior como lo es la contención de China, Irán y Rusia en términos reales.
Lo anterior es importante si entendemos la doctrina de “Follow the Money” (persigue al dinero). Biden ya ha expresado que en su administración el monto de 900 mil millones utilizados por Trump para enfrentar al coronavirus será visto a penas como “un adelanto, una prima” en comparación de lo que él invertirá. Ya ni se diga lo que requerirán para la contención económica, científico y militar contra China y Rusia. O en el medio ambiente con 1,700 millones de dólares ya anunciados para los próximos 10 años.
Hasta ahora, los demócratas parecen ser pesimistas de tener un resultado rotundo hoy en Georgia, a pesar de haber tenido una excelente recaudación de fondos y utilizar por lo menos 18 millones de dólares en las dos vueltas electorales. Mediáticamente han los demócratas han explotado el hecho de darle un sentido ilegal a la llamada realizada por que Trump como presidente del país al Secretario de estado de Georgia demandándole encuentre más de 11, 700 votos fraudulentos.
Se esperan diversas posibilidades de choque interracial y partidarios tras los resultados por la noche en el Estado de Georgia o al siguiente día y que pueda extenderse estos en otros Estados en disputa. Se ha observado serio movimiento de efectivos del ejército en el aeropuerto de Atlanta, capital de Georgia.
Certificación de los votos del colegio electoral en el congreso
Posibles Escenarios Previstos a ocurrir el 06 de enero 2021 en el Congreso USA
Por orden constitucional, por más de 100 años, la certificación de los votos del colegio electoral presentados en cada capital estatal el pasado 14 de diciembre del 2020 deberá ser ratificada por el congreso (ambas cámaras) el 06 de enero del 2021.
En la estrategia de Trump dicha certificación no será el punto final de la contienda electoral. Dicha estrategia se extendería a un plazo más extenso en diversas etapas posteriores, según como de la caja de pandora logre en tiempo sacar y realizar cada acción.
las posibles acciones de los republicanos a realizar el 6 de enero, para muchos podrán indicar la viabilidad de que Trump pueda continuar la reversión del resultado electoral o desistir definitivamente.
Mediáticamente se especula que el Senador Ted Cruz lidera un movimiento de por lo menos unos 140 miembros de la Cámara de Representantes y unos 11 miembros del Senado (republicanos todos) que votaran en contra de la confirmación de los votos emitidos por el colegio electoral ese día. La lógica se basará en:
a) No reconocer los votos en los Estados en disputa (por lo menos de seis) por muchas irregularidades excesivas.
b) Pedir una auditoria que se complete en diez días.
c) En realidad necesitan tan solo revertir en tres Estados Georgia, Pensilvania y Arizona) para que gane Trump.
Ese día por mandato constitucional el actual vice-presidente Mike Pence:
a) Presidirá la sesión (lo que ya es una señal positiva para Trump) y en su pasado discurso en Georgia le demandó a Pence que saliera al encuentro.
b) Deberá presentar todos los documentos que se declaren como votos electorales.
c) Deberá leerlos en orden alfabética por Estado
d) Dará la oportunidad de que los miembros del congreso puedan emitir cualquier objeción durante la sesión.
Los escenarios fuera de lugar que se esperan:
A) Inclinación a los electores no formales.
- Que durante la lectura de Pence aparezcan votos del colegio electoral a favor de Trump en los estados donde han afirmado hasta ahora que Biden ha ganado. No sería la primera vez que electores modifican la inclinación del voto aun cuando son sancionados. Esta acción es la que menos ocasionaría mayor fisura y división en el país ya que se habla desde golpe de Estado hasta Guerra Civil.
- Que producto de este cambio ocurra un empate y se deba definir según lo establecido por la constitución. En este caso le da más tiempo a Trump de que Biden no llegue a la casa Blanca el 20 de febrero. Por la correlación de fuerzas en la cámara de representantes, esto a lo inmediato no le convendría a Trump, pero si a Pence donde los republicanos hasta ahora tienen la mayoría. A largo plazo si le convendría a Trump para postularse en las elecciones del 2024.
- Que Pence se niegue a presentar los votos de los electores de Biden en los Estados en disputa. Que más bien presente los votos de los electores de Trump en aquellos Estados donde los demócratas aseguran que ganó Biden. Ocasionando así una interrupción de la certificación hasta llegar a un debate mayor a nivel de investigaciones y prolongadas audiencias del congreso.
B) La presentación de rechazo a los votos de los electores demócratas.
- Que una cantidad nunca antes vista de miembros del senado y la Cámara de Representante republicanos utilicen lo dispuesto en la constitución y efectúen el rechazo.
- Que se dé la suspensión de la sesión como por ley está previsto y se retiren por dos horas los jefes de bancadas a debatir a lo interno. Para dar luego sus resultados. La máxima decisión difícil a tomar seria solo contar aquellos votos certificados por los gobiernos estatales. De no haber consenso el reconocimiento puede de nuevo abrir las puertas para iniciar las investigaciones y las audiencias prolongadas o que la Corte Suprema dirima en el caso.
- Que una falta de consenso inesperada dentro de la cámara liderada por los demócratas resulte como resultado de la votación interna a Trump. Esto se pudo ver el domingo tres de diciembre en la selección de Nancy Pelosi, quien gano por cuarta vez su reelección como presidente de la Cámara con muy poco margen.
En todo caso varias situaciones a darse ese día se deben de considerar de manera transversal como altamente influyentes.
- Usar a su favor e apoyando la idea del fraude, si los republicanos ganan en la segunda vuelta para el senado en Georgia el 5 de enero.
- La cantidad de protestantes republicanos contra el fraude de Biden que llegará a Washington D.C y la situación de presión que generen.
- Que el Congreso se niegue a dirimir y la Corte Suprema también y se convoque a la Corte militar a tomar el caso.
- La movilización del ejército en función de:
a) La implementación de la ley marcial. Apoyado en la tesis de choques entre los partidarios de ambos partidos en varios Estados y mayores medidas de restricción ante el aumento de contagio de la corona virus como es el caso en California.
b) Un ataque sorpresivo a Irán.
c) Una escaramuza en el Sur del mar de China.
d) Un ataque a Venezuela.
Ni Trump ni Biden tienen ningún grado de credibilidad y ellos lo saben, pero tienen muchos seguidores tanto dentro del partido, como en la población y en el Estado profundo que les respalda a ambos. Lo que si es cierto es que la contienda política electoral en los Estados Unidos ha logrado absorber la atención global con la prolongación de su show mediático electoral. Y no hay duda, que tras esta enorme cortina de humo se esconden montos enormes de capital procedentes de la reserva federal y el endeudamiento público del pueblo norteamericano que están yendo a parar a manos de las elites económicas y políticas de ese tan desigual socio-económicamente país.
Por eso el show debe continuar y será para rato si es que Trump sobrevive al 6 de enero.
Manuel Salvador Espinoza Jarquín