«Aquí estamos de pie y combatiendo», afirmó temprano en la mañana de este jueves, desde la sede del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, el Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien encabezó la reunión de chequeo a los daños provocados por el paso del huracán Rafael, donde también quedaron definidas las próximas acciones para la recuperación del país.
Como ya es costumbre, las matrices de la maquinaria mediática adversa a la Revolución, intentan propagar la falsa noticia de que Cuba ha colapsado. Pero la realidad es otra: en el momento de la reunión ya se había avanzado en restaurar el servicio eléctrico en las zonas central y oriental del archipiélago, al tiempo que quedaba pendiente ir monitoreando al detalle las líneas y sistemas de generación de la zona occidental, para levantar esa parte del Sistema Electroenergético Nacional sin imprecisiones ni retrocesos.
«Ya tenemos organizada toda la fase recuperativa ante los daños dejados por el ciclón», dijo el Jefe de Estado; y afirmó que hasta ahora no hay que lamentar pérdidas de vidas humanas.
«Nos vamos a recuperar en el menor tiempo posible, y seguiremos atendiendo la recuperación en Oriente», expresó el mandatario en una jornada que también contó desde la presidencia con el secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales Ojeda; con el Héroe de la República de Cuba y ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), general de Cuerpo de Ejército Álvaro López Miera, y con el ministro del Interior de Cuba, general de División Lázaro Alberto Álvarez Casas -los tres, miembros del Buró Político del Partido Comunista.
A través de videoconferencia y con la presencia de los ministros y de representantes de entidades importantes para el país, transcurrió el chequeo en cuyo inicio el Presidente de la República enunció que “hay mucho por hacer, mucho por trabajar”. Y en la misma línea de razonamiento dijo que ahora los principales dirigentes y decisores deben estar más en el terreno, allí donde hay que hacer posible la obra recuperativa.
Aunque ya el huracán se había alejado del territorio nacional, el director general del Instituto Nacional de Meteorología (INSMET), Celso Pazos Alberdi, habló sobre la importancia de no descuidar la persistencia de las lluvias en las zonas occidental y central del país.
Por su parte el Primer Coronel, Luis Ángel Macareño, del Órgano de la Defensa Civil, informó que las provincias de Cienfuegos, Villa Clara, Sancti Spíritus, y Matanzas, así como el Municipio Especial de la Isla de la Juventud, podían pasar a la fase de normalidad; mientras que Pinar del Río, Mayabeque, Artemisa, y La Habana, podían pasar a la fase de recuperación.
El Presidente Díaz-Canel pidió que, en lo referente a las provincias centrales, se preste especial atención a los procesos de escurrimiento desde las zonas montañosas. Habló de observar para que luego no sobrevengan las sorpresas.
REPORTE DE LAS PROVINCIAS
Sobre la provincia de Pinar del Río, pudo conocerse en el chequeo que 25 352 personas fueron puestas a buen resguardo para las horas del paso del huracán. En el momento de la reunión, quedaban unas tres mil personas protegidas, sobre todo en casas de familiares y amigos.
Allí, según detalló la presidenta del Consejo de Defensa Provincial, Yamilé Ramos Cordero, hasta entonces no se reportaban daños significativos, como tampoco fueron considerables las lluvias ni los vientos. En el territorio, añadió, todos se prepararon para priorizar el funcionamiento de los centros que resultan vitales.
«Hay mucho que hacer en Mayabeque, Artemisa y La Habana», enfatizó en un momento de la jornada de análisis el Presidente Díaz-Canel Bermúdez. Sobre la provincia de Artemisa, se supo que hubo afectación en centros asistenciales; que el viento provocado por el fenómeno meteorológico fue significativo; y que más de 32 700 personas fueron protegidas ante el paso de Rafael.
En cuanto a La Habana, fueron puestas a buen resguardo 99 863 personas. Las autoridades de la capital informaron a la dirección del país que, gracias a trabajos previos realizados por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, no hubo que sufrir grandes inundaciones. Hasta el momento de la reunión, se habían cuantificado afectaciones en 77 viviendas y en 21 centros relevantes en lo económico y lo social. El territorio, según se dijo, tenía entre sus tareas primordiales lograr la vitalidad en el bombeo del agua y mantener en pleno funcionamiento a los hospitales.
El Jefe de Estado convocó a trabajar para que La Habana quede limpia. E hizo hincapié en que todas las organizaciones y los ciudadanos tomen parte en esa jornada de embellecimiento de la ciudad.
La provincia de Mayabeque -donde se encontraba presente el integrante del Buró Político y vicepresidente de la República de Cuba, Salvador Valdés Mesa- llegó a proteger a 58 145 personas. La presidenta del Comité de Defensa Provincial, Yuniasky Crespo, informó que las mayores afectaciones en la agricultura se produjeron en cultivos como el plátano y la yuca.
Allí, donde han caído muchos árboles, todavía llovía en el momento de la reunión de chequeo. Los municipios de Batabanó, San Nicolás y Nueva Paz sufrieron la intensidad de las precipitaciones, y el cien por ciento de la provincia no tenía servicio de electricidad.
En el Municipio Especial Isla de la Juventud -donde fueron protegidas 6 062 personas- no hubo grandes afectaciones; y en cuanto al servicio eléctrico, ya estaba restablecido el 65,5 por ciento del mismo.
Al intervenir en la jornada de análisis, el integrante del Buró Político y Primer Ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, hizo énfasis en la importancia de centralizar y monitorear todos los recursos disponibles. Y llamó la atención sobre la matriz falsa, expandida en las redes sociales, de que el país estaba apagado.
Hacia el final del Chequeo, el Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, orientó organizar toda la información estadística posible, con vistas a tomar decisiones para la recuperación. Igualmente recalcó concentrar los esfuerzos en las provincias de La Habana, Artemisa y Mayabeque, las más dañadas por el impacto de Rafael; habló de limpiar las vías obstruidas; del empleo eficiente de los medios de comunicación; de reforzar las medidas sanitarias; de que las autoridades mantengan el contacto directo con la población; y de garantizar la alimentación de las personas vulnerables, así como de vender comida en distintos puntos de los territorios afectados.
El dignatario subrayó que es importante definir, por zonas, cuándo se reemprende el curso escolar. Y volvió sobre la idea de recoger ramas, árboles, y toda la basura que sea posible.
«Hay que trabajar con la concepción de que el país está en pie», definió Díaz-Canel Bermúdez, quien convocó a todas las cubanas y cubanos a trabajar, cuadra por cuadra, para que el país se recupere lo antes posible.
Fuente: Diario Granma