La cifra de víctimas en 247 días de incesantes ataques aéreos y bombardeos de la artillería israelí en la ocupada Franja de Gaza aumentó hasta hoy a 37.084 muertos y 84.494 heridos, precisa la autoridad de Salud del ocupado enclave palestino.
Al menos 283 personas murieron en la Franja de Gaza durante las últimas 24 horas, lo que eleva a más de 37.000 el número de víctimas palestinas en la guerra entre Israel y el movimiento Hamás, informaron desde el Ministerio de Salud gazatí.
En el último día, 698 personas resultaron heridas por el fuego israelí en esta operación, y el total de heridos desde el 7 de octubre ascendió hasta los 84.494 en todo el territorio, la mayoría mujeres y niños, según el ministerio.
Contando con estas cifras, en las últimas 24 horas murieron 283 gazatíes y resultaron heridos otros 814 en toda Gaza.
Los bombardeos y la artillería israelí siguen alcanzando el centro de la Franja de Gaza un día después de que al menos 274 personas murieran y más de 800 resultaran heridas tras la operación de rescate del Ejército israelí de este sábado en el campo de refugiados de Nuiserat.
La operación en Nuseirat supuso el bombardeo de «89 casas habitadas y edificios residenciales», que acabó con la vida de «64 niños, 57 mujeres y 37 ancianos», según ha revelado hoy la Oficina de Comunicación del Gobierno de la Franja en un comunicado.
Además, entre los heridos se encontraban 153 niños, 161 mujeres y 54 ancianos.
«Fuentes médicas confirmaron la muerte de al menos tres civiles y múltiples heridos después de que las fuerzas de ocupación israelíes atacaran una casa perteneciente a la familia Abu al Kas en el campo de refugiados de Bureij, en el centro de Gaza.
El Ejército israelí confirmó este domingo que parte de sus operaciones militares siguen concentradas en la ciudad de Deir al Balah y en el este de Bureij, donde aseguran que «eliminaron a múltiples terroristas y desmantelaron sitios de infraestructura militar».
El jefe de ayuda de la ONU expresó su preocupación por el ataque israelí al campo de refugiados de Nuseirat en el centro de la Franja de Gaza.
«Hoy en día, el campo de refugiados de Nuseirat es el epicentro del trauma sísmico que siguen sufriendo los civiles en Gaza.
«Las imágenes de muerte y devastación tras la operación militar de Israel allí demuestran que cada día que continúa esta guerra, se vuelve más horrible», dijo Martin Griffiths en un comunicado.
Griffiths reiteró que ningún lugar es seguro en Gaza y que la atención sanitaria en el enclave asediado «pende de un hilo».
Fuente: TeleSur