El vocero oficial de la Autoridad Nacional Palestina, Nabil Abu Rudeineh, dijo este domingo que las continuas provocaciones israelíes contra la mezquita Al-Aqsa son inaceptables y denunció lo que llamó los ataques «injustificados» por parte de Tel Aviv.
De acuerdo a Abu Rudeineh, esas acciones por parte de Israel «convertirán sus patios en un campo de batalla, lo que conducirá a un grave deterioro de la situación».
En ese sentido, agregó que «Los ataques diarios contra los lugares sagrados y los feligreses en ellos durante el bendito mes de Ramadán son medidas condenadas y acciones inaceptables que trabajan para encender la región y arrastrarla hacia el abismo».
El vocero de la ANP responsabilizó al Gobierno de ocupación israelí por los resultados a los cuales conducirá la situación» como resultado de la continua comisión de crímenes y la profanación de lugares sagrados».
Asimismo enfatizó que «el desafío de la ocupación a nuestro pueblo no desalentará su determinación, y seguirá siendo firme en la defensa de su tierra y sus lugares sagrados a toda costa, y que Jerusalén, con sus lugares sagrados, es la capital eterna del Estado de Palestina».
Denunció, por último, «todas las medidas israelíes y el apoyo estadounidense no conducirán a la seguridad y la estabilidad».
Antes, el Ministerio de Relaciones Exteriores palestino condenó los continuos ataques contra la Mezquita de Al-Aqsa y los fieles y el aislamiento en ella.
La Cancillería también condenó las continuas campañas de incitación lanzadas por extremistas extremistas, encabezadas por el ministro israelí Ben Gvir, que piden cambiar el statu quo en la mezquita, así como la incitación contra toda la presencia palestina, «perpetuando las incursiones y ampliando el círculo de sus participantes, lo que queda claramente demostrado por el notable aumento del número de incursiones».
Consideró que la continua agresión israelí contra la Mezquita Al-Aqsa «es una extensión de los intentos de cambiar su realidad legal e histórica existente, con el objetivo de perpetuar su división temporal dividiéndola espacialmente, y el desprecio oficial israelí por los derechos árabes, islámicos e internacionales. posiciones y demandas globales para que el gobierno israelí desista de sus medidas represivas y detenga las incursiones provocativas»
En definitiva, el Gobierno de Palestina advirtió «sobre los resultados de las continuas y sistemáticas campañas de incitación contra Jerusalén y sus santidades y sus repercusiones» y pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que tome las medidas prácticas necesarias para implementar las resoluciones pertinentes de la organización.
Fuente: TeleSur