La ciudadana rusa Daria Trépova, la principal sospechosa de perpetrar un atentado en el centro de la ciudad de San Petersburgo en el que murió el corresponsal de guerra Maxim Fomín, más conocido por su seudónimo Vladlén Tatarski, ha sido arrestada este martes por dos meses de prisión.
«El tribunal dictaminó satisfacer la petición de la investigación y seleccionar una medida preventiva en forma de detención por un período hasta el 2 de junio de 2023 para Daria Trépova», comunicó el juez. El tribunal leyó solo la parte resolutiva de la decisión, de la que se desconocen los motivos.
El principal departamento de investigación del Comité de Investigación de Rusia ha acusado a Trépova de cometer delitos en virtud de un artículo del Código Penal ruso que hace referencia a «un acto terrorista cometido por un grupo organizado que resultó en la muerte intencional de un persona», así como «porte ilegal de artefactos explosivos cometido por un grupo organizado». El Comité había presentado una petición ante el tribunal para que Trépova fuera puesta en prisión preventiva.
Según el Comité Nacional Antiterrorista ruso, el atentado fue planeado por los servicios especiales de Ucrania. Trépova, quien resultó ser partidaria activa del Fondo Anticorrupción de Alexéi Navalny (entidad que fue declarada agente extranjero y prohibida en Rusia como organización extremista), admitió haber llevado una estatuilla cargada con explosivos al local en el que se realizaba un evento en el que participaba Tatarski.
El corresponsal de guerra falleció en el lugar, mientras que unas 40 personas resultaron heridas. De acuerdo con datos preliminares, la potencia del estallido fue equivalente a 200 gramos de TNT.
Según los reportes, Trépova había estado realizando una serie de tareas que se le encargaban desde Ucrania a cambio de recompensas económicas. A través de un canal de Telegram ucraniano, conoció a una persona que le ofreció la oportunidad de mudarse a Kiev y le prometió un cargo en un canal de medios no identificado, a cambio de superar varias pruebas, entre ellas, entregar la estatuilla al periodista.
Sin embargo, ella ha negado tener conocimiento del contenido explosivo del objeto, asegurando que había sido engañada.
Por su parte, el Gobierno de Nicaragua expresó a Moscú sus condolencias por el atentando. «En estos momentos de tristeza y dolor para los familiares del corresponsal de guerra Maxim Fomín, más conocido por su seudónimo Vladlén Tatarski, un dolor compartido por el pueblo y Gobierno rusos, enviamos, junto a nuestra condena por toda acción terrorista y esta en particular, nuestras profundas y sentidas condolencias», reza el comunicado oficial.
«Frente a estos actos deleznables de criminalidad y terrorismo, que pretenden censurar y limitar la libertad de expresión con crímenes e intimidaciones como estas, nuestro rechazo contundente», expresó Managua, agregando que «condena estas prácticas que violentan los derechos de todos».
Fuente: RT