Para la gran mayoría de los nicaragüenses, la bandera es símbolo de Soberanía y Dignidad. Digo la “gran” mayoría, porque existen minorías que todavía intentan pisotearla, siguiendo los pasos de exgobernantes libero conservadores somocistas defensores de intereses extranjeros.
Y es que, a lo largo de la historia, la mala política nacional y el servilismo de exgobernantes defensores de los intereses del gobierno de EE.UU. generaron que nuestra bandera fuera violentada en múltiples ocasiones. Por medio de tratados y acuerdos que solo beneficiaron intereses individuales y del invasor, los marines yanquis desembarcaron en territorio nacional, lo que causó muerte, miseria y pobreza para nuestro Pueblo.
Frente a estas injusticias cometidas, existieron Patriotas nicaragüenses que alzaron su voz para defender nuestra bandera. Aquí destacamos la participación de José Dolores Estrada, Andrés Castro, Benjamín Zeledón y Augusto César Sandino.
El primero de enero de 1933 fueron el General Augusto César Sandino y su Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua, enarbolando la bandera roja y negra, quienes expulsaron a los marines yanquis de suelo nicaragüense y propiciaron de esta manera, la primera derrota militar a la nación norteamericana. El General Augusto César Sandino fue el primero que rescató nuestra bandera nacional de las garras invasoras.
Con el asesinato a traición del General Sandino y el arribo del somocismo al poder, la Guardia Nacional fue el ente represor encargado de arremeter contra nuestra bandera. Aquí el gobierno de Estados Unidos no requería intervención directa por marines para arremeter contra nuestra soberanía y someter a nuestro Pueblo, ¿Para qué, si tenía a Somoza que dirigía a la Guardia Nacional?[1]
El 19 de Julio de 1979, el Pueblo de Nicaragua y su vanguardia, el Frente Sandinista de Liberación Nacional, comandaron el derrocamiento de más de cuatro décadas de una de las dictaduras militares más crueles de América Latina. Más de 50 mil hermanos/as nicaragüenses ofrendaron su vida por esta Nicaragua Libre.
Fue este el momento histórico donde nuestro Pueblo logró su independencia definitiva. De esta forma, nuestra bandera Azul y Blanco finalmente fue izada en suelo soberano e independiente. Como una demostración, rindiendo honor a la histórica lucha y al costo de lograr esta gesta de liberación nacional, el Pueblo decide izar a su lado la bandera roja y negra, como símbolo de protección y resguardo a la bandera Azul y Blanco frente a cualquier agresión nacional o extranjera.
La actualidad nicaragüense solo puede verse digna y con admiración. Como Pueblo, hoy gritamos al mundo que tenemos Patria, que actualmente existe un proyecto de Nación con políticas gubernamentales de crecimiento socio-económico que promueven los intereses Populares, no los extranjeros.
Rindiendo honores al sacrificio de nuestros Héroes y Mártires y aplaudiendo las políticas gubernamentales actuales que se focalizan en la restitución de derechos humanos del Pueblo celebramos el Día de la Bandera[2] Azul y Blanco, que finalmente ondea Soberana e Independiente en esta tierra Bendita y Libre.
Los apátridas sueñan con ver izar nuestra bandera en el capitolio estadounidense, abominables, indignos hijos de la Patria; nuestra bandera nacional es y seguirá siendo protegida con la valentía de hijos/as que aman Nicaragua.
Escrito por Germán Van de Velde
14/07/2022
Notas:
[1] Recordemos las palabras del presidente de Estados Unidos Franklin Delano Roosvelt en referencia al dictador de Nicaragua Anastasio Somoza García “Somoza may be a son of a bitch, but he´s our son of a bitch”, que traducido al español significa “Somoza puede que sea un hijo de perra, pero es nuestro hijo de perra”.
[2] La bandera Nacional de Nicaragua fue creada por Decreto Legislativo el 5 de septiembre de 1908, al igual que el Escudo Nacional. El 14 de Julio de 1970 fue oficialmente cancelado el Tratado Chamorro Bryan.