La Revolución Popular Sandinista, en su programa histórico del año 1969 mencionó que impulsaría una campaña masiva para exterminar en forma inmediata el analfabetismo[1].
¿De dónde nace este planteamiento? ¿Cuál es la evolución de este concepto a lo largo de la historia de Nicaragua?
Antes de 1979
La campaña de alfabetización tiene los cimientos en el año 1967, en Pancasán, cuando el Comandante Carlos Fonseca orientó a los guerrilleros sandinistas a enseñar a leer a los campesinos, el sector más afectado por el analfabetismo. En base a esto, el Comandante Tomás Borge, en su libro “Los Primeros Pasos: La Revolución Popular Sandinista”, mencionó:
“Carlos, personalmente, inició esta campaña de alfabetización cuando nos dijo a Germán Pomares y a mí mientras entrenábamos militarmente a un grupo de campesinos, enseñándoles a manejar los fusiles: llegó y nos dijo: “También enséñeles a leer.”
Esta campaña iniciada por el Comandante Carlos Fonseca Amador tenía sus antecedentes desde que trabajaba en la revista “Segovia”, cuando era estudiante de secundaria. Según el Comandante Carlos, era necesario llevar la alfabetización y después la civilización a los trabajadores y campesinos pobres. En este tiempo, más del 80% de la población rural de Nicaragua era analfabeta y los estudiantes consideraban un deber patriótico difundir el saber en el campo.
Otro de los estudiantes, Francisco Buitrago, quien era colaborador de esta revista, justo en su primera edición llamaba a los estudiantes a “ocupar… el lugar de soldado, listo a la llamada de su patria y anhelante de empuñar las armas del pensamiento”. En las últimas ediciones de la revista, Buitrago mencionó: “debemos de preocuparnos para que los campesinos, pequeños terratenientes y mozos, aprendan a leer y escribir, y con esto no solo tendremos hombres analfabetos, sino que tendremos una Nación más adelantada.”
En dicha revista, a lo largo de los diferentes volúmenes, los autores hacían exhortaciones para que los terratenientes y empleadores. Algunos ejemplos claros fueron: “Ud. Que tiene hacienda, dese cuenta quiénes son sus trabajadores analfabetas y enséñeles a leer y escribir” y “enseñe a leer a su sirvienta y hará lo mejor de su vida”. [2]
Período entre 1979 – 1990
En el año 1979, cuando triunfa la revolución sandinista, Nicaragua tenía 52% de analfabetismo. Sin embargo, al sumar a las personas que solamente podrían escribir su nombre, el valor incrementaba a 60%.
Estaba claro que a los gobiernos oligarcas de la dictadura somocista no les interesaba educar al pueblo, ya que su intención era mantenerlo en la ignorancia como forma de obtener mano de obra barata.
El Comandante Daniel Ortega (agosto 2009) mencionó:
“Querían mano de obra barata, cuanto más ignorante, más fácilmente se les contrata por cuatro pesos, por la necesidad y hasta los pobres pelean por el mismo trabajo, pero si la gente tiene preparación, la gente aprende a defender su derecho, aprende a defender el derecho a la educación y la cultura, que es un derecho humano”.[3]
La Gran Cruzada Nacional de Alfabetización inició en mayo y finalizó el 23 de agosto de 1980. El Comandante Bayardo Arce, en su discurso realizado dirigido a los/as alfabetizadores durante el acto de salida de la cruzada nacional de alfabetización, en mayo (1980) dijo:
“Del éxito que nosotros tengamos en esta cruzada de alfabetización ahora, depende el éxito de los planes de desarrollo de la Revolución Sandinista en nuestro país. Ahora el problema de los revolucionarios es ver qué producimos en este país, cuánto producimos en este país, para que esas riquezas, esos bienes, esos servicios producidos por la clase trabajadora puedan ser distribuidos con justicia, en forma equitativa ente todos los obreros, campesinos y trabajadores de Nicaragua. ¿Y cómo nosotros podemos llegar a obtener eso si nos encontramos con un 52% de nicaragüenses que no saben leer y escribir? Esa es la importancia fundamental de la campaña de alfabetización, sentar las bases entre los obreros y los campesinos, para que sabiendo ellos leer y escribir, se preparen técnicamente, se preparen políticamente, se preparen ideológicamente y sean los que conduzcan hasta el infinito el poder popular dentro del proceso revolucionario nicaragüense.”
Con esta acción, más de 95000 alfabetizadores pudieron enseñar a leer y escribir a 406 582 nicaragüenses que no habían tenido acceso a la educación durante los cuarenta años de dictadura somocista.[4]
La Cruzada Nacional de Alfabetización fue reconocida por la Organización de Naciones Unidas por la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como la mayor movilización de jóvenes para la erradicación del analfabetismo en 1980. El aporte de los jóvenes durante la primera campaña de alfabetización en 1980 redujo el índice de analfabetismo del 60% a un 10.5%.
Período entre 1990 – 2007
Sin embargo, tras la derrota electoral del FSLN en 1990, los gobiernos neoliberales de Violeta Chamorro, Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños, se encargaron de incrementar las tasas de analfabetismo. Al final del período del expresidente Bolaños, más del 33% de la población adulta de Nicaragua era analfabeta, de la cual más del 50% eran mujeres. Es decir, cerca de un millón de personas de más de 15 años tenían falencias de capacidades básicas de lectura, escrita y cálculo[5].
En el año 2007, el gobierno sandinista se encontró, además de centenares de miles de iletrados, también 27 mil aulas destruidas.
En el año 2009, el Gobierno de Nicaragua fue declarado territorio libre de analfabetismo. Los últimos datos oficiales señalan que para el 2005, la tasa de analfabetismo era solo del 3%.
Ejecutar una obra de tan magnitud para el pueblo, como lo fue reducir el analfabetismo, se requieren gobiernos con conciencia y valores morales.
“Porque para que Nicaragua sea verdaderamente libre, es con el Frente Sandinista que Nicaragua va a alcanzar su plena libertad, cuando no haya analfabetos, cuando no haya hambre, cuando no exista pobreza, cuando no exista miseria en nuestro país, entonces, seremos libres.” (Comandante Daniel Ortega)
Sin Revolución no hay Alfabetización.
¡Al alfabetizar casa por casa. . . organizaremos a las masas!
A la Unidad y el Amor
Germán J. Van de Velde
Tomado de: https://www.redvolucion.net
[1] https://barricada.com.ni/programa-historico-del-fsln/
[2] Zimmermann M. (2003). «Carlos Fonseca Amador y la revolución nicaragüense». Pp. 47-48
[3] https://www.lavozdelsandinismo.com/nicaragua/2009-08-22/nicaragua-libre-de-analfabetismo/
[4] https://www.hispantv.com/noticias/nicaragua/386218/aniversario-cruzada-alfabetizacion-educacion-ensenanza
[5] http://www.sinpermiso.info/textos/nicaragua-el-fracaso-neoliberal
También, te recomendamos leer:
Toma del Palacio Nacional: ¿Cómo ejecutaron el plan?
La forma más aguda de hacer la revolución en una nación empobrecida , en un país de lacayos y traidores , es y debe ser , luchar porque sus campesinos y sectores populares aprendan a leer y escribir como primer paso, luego se les enseña a construir el pensamiento objetivo de ruptura idiologica con la oligarquía que por tanto tiempo lo ha mantenido en la ignorancia. Por lo que los plantiamientos del comandante Carlos Fonseca hechos en aquella época, hoy tienen toda su validez y deben llevarse a la práctica por todos los pueblos amante de la paz y la justicia social.
Primera vez que leo este cuaderno y realmente me resulto muy interesante para aprendizaje base ya que considero que nosotros los sandinistas debemos estar al día con la información para aquellos que aun no habían nacido antes del año 1979.